N/D
Naturaleza perturbada, por Ángeles Díaz Barbado

Naturaleza perturbada, por Ángeles Díaz Barbado

Fachada mediática y Sala 0

Pocas épocas, desde el punto de vista de la historia cultural, representan un viaje tan fascinante como el que transcurre entre las Wunderkammern del siglo XVII y las páginas y planches de la Encyclopédie o aquellas otras de la Historia naturalis que desde Johnston a Tournefort, de Linneo a Buffon escriben uno de los capítulos centrales de la nueva mirada sobre la naturaleza. Y si en los gabinetes barrocos se mostraban aquellos mirabilia, todos aquellos objetos que ocuparon la curiosidad insaciable de quienes amaban los extremos del mundo, sus irregularidades naturales, sus excepciones y aquel extraño universo de sombras del que emergían los monstruos - ¿los monstruos - anotará Foucault - son como el ruido de fondo, el murmullo ininterrumpido de la naturaleza¿ - , será ahora una nueva mirada la que intente poner orden en el mapa de los seres, estableciendo entre taxonomías y otras clasificaciones un mapa de lo que ya desde Plinio constituía el mundo natural.

Ha sido Blumenberg quien, al explorar los momentos de la curiosidad moderna, ha sugerido ese mapa de relaciones culturales que se hallan en la base de aquellos mecanismos que rigen los sistemas de observación, análisis y clasificación del mundo. Y resulta especialmente interesante ver cómo a lo largo del siglo XVII las fronteras de la visibilidad son todavía muy borrosas, dando lugar a bizarras interpretaciones como las del universo barroco. Será el obstinado trabajo de los naturalistas del XVIII el que alejará el relato de la fantasía para acercarnos al mundo de los hechos, si cabe todavía más fascinante que el dictado por la fantasía del imaginario. Recorrer hoy sus páginas ilustradas nos sugiere no sólo los cambios epistemológicos a lo largo de los siglos modernos, sino que deja atrás aquel otro orden que en su momento propusiera el museo de Athanasius Kircher. En lugar del theatrum mundi emergerá el espacio abierto de la observación de una nueva curiosidad.

El camino iniciado entonces se ha convertido en un mar de dimensiones infinitas. Basta asomarse a las colecciones de los museos de Historia natural para reconocer la pluralidad de un mundo que en sus variaciones nos muestra la compleja deriva de lo que más tarde definirá los parámetros de la Evolución. Desde las primeras hipótesis sobre la Urpflanz que Goethe hiciera en su visita al Jardín botánico de Palermo, hasta las verificaciones que Darwin presenta en su On the Origin of Species, un largo viaje busca reconstruir el tiempo de la tierra y sus habitantes. Linneo sabía muy bien que la experiencia no nos entrega el continuo de la naturaleza, que vemos expuesta a infinitas lagunas en las series ocupadas por las variables. Todavía no lo podrá sospechar, pero el aparente orden no es más que azar, desorden y perturbación. Una historia natural que en sus emergencias, con sus insospechados momentos, marcará una nueva profundidad, una ¿nueva ansiedad¿, alejada de la transparencia luminosa del gabinete del naturalista y que M. Ángeles Díaz Barbado interpreta en sus dibujos. Guiada por una curiosidad singular ha recorrido esa línea de sombra que le permite descubrir una historia secreta en la que tras morfologías misteriosas aparecen seres maravillosos con miradas enigmáticas. Vienen de tiempos lejanos y han resistido todas las intemperies. Y es ahora que Díaz Barbado los vuelve a convocar y reúne en los espacios protegidos del C3A de Córdoba.

Comisario: Francisco Jarauta

Fuente: https://www.juntadeandalucia.es/cultura/agendaculturaldeandalucia/evento/naturaleza-perturbada-por-angeles-diaz-barbado
Download App iOS
VIRAL App
Download App Android